jueves, 6 de noviembre de 2014

EL MUNDO NO HA CAMBIADO MUCHO. ( primera parte ).

El mundo no ha cambiado mucho. (Inquisición moderna).



El desempeño de Jesucristo durante su vida como ser humano, permitió que fuera identificado como El Hijo de Dios para los religiosos. O, como un hombre con características especiales para los que no profesaban creencias religiosas.
De todas maneras, resulta evidente que durante su peregrinación hubo de expresar VERDADES tales, que le acarrearon el oprobio y la muerte a manos de un imperio hostil y de un pueblo ignorante.

La única posibilidad de salvación que le ofrecieron fue retractarse, pero su propósito era mediante su muerte resarcir a la humanidad del pecado heredado. Y así se cumplió.


Galileo Galilei 1564-1642, físico y astrónomo italiano.
Aunque en este momento no es mi intención profundizar sobre  la vida de este hombre genial, si sería bueno recordar que siendo poseedor de una VERDAD UNIVERSAL, y no solo por la inmensidad de la misma sino porque además se trataba del propio universo, tuvo que retractarse ante la Santa Inquisición para evitar ser quemado vivo.

En este siglo XXI, no se efectúan ejecuciones al amparo de la antigua Santa Inquisición, aunque el transcurso de la vida ha demostrado que las personas, instituciones y gobiernos, son capaces de condenar a la muerte psicológica, física o social, a cualquier persona cuando es portadora de VERDADES que implican riesgos para sus malvados intereses.
La magnitud del daño físico, psicológico, o social y sus consecuencias, están en correspondencia con la magnitud de la VERDAD que yo haya expresado. Fundamentalmente en países donde imperan regímenes totalitarios como Cuba, Venezuela, China, etc. En los cuales las VERDADES que denuncian injusticias por parte del gobierno y sus aliados suelen ser silenciadas, mientras se traman calumnias, encarcelamientos o asesinatos a los portadores de esas VERDADES.

En países como estos donde no existen  derechos civiles los gobiernos desatan campañas destructivas a la vida y moral de todo  aquel que  no se les somete.


Las falsas acusaciones por haber atentado contra la vida de un miembro de la policía, o de un miembro de la Seguridad de Estado se han puesto de moda en los tribunales comunistas, como pretexto para sacar a los disidentes de las calles.
En países como estos donde los oportunistas, los delincuentes y los delatores se prestan para cualquier bajeza, y lo que resulta más triste, es que aguantan callados, soportan el genocidio comunista, cooperan con las organizaciones políticas, le efectúan actos de repudio a los opositores, incluyendo a mujeres Damas de Blanco.
Mientras que al igual que el resto de la población sufren los abusos del comunismo.

Así eran el gobierno y el pueblo que dieron muerte a Jesucristo.

Así era Roma en la Edad Media.

Así es en este siglo XXI.
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EN ESE SENTIDO EL MUNDO NO HA CAMBIADO MUCHO.







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